¿Qué precio tiene un video corporativo?
¿Hay algo que podamos hacer para bajar su precio?

Hacer un presupuesto de un vídeo corporativo es una tarea compleja ya que no hay dos videos iguales, pero sobre todo, porque falta mucha información a la hora de solicitar un presupuesto que se espera que quede cerrado con apenas dos líneas de briefing, lo que resulta complicado porque un vídeo corporativo nace con muchas preguntas y pocas respuestas, y lo cierto es que cada pregunta esconde un coste, por lo que es importante saber qué preguntas nos debemos a hacer, y en qué medida cada respuesta afecta al presupuesto de una producción de vídeo.

 

Empecemos por detectar las primeras preguntas que debemos hacernos a la hora de solicitar una valoración de un video. Y para ello vamos a dividir la producción de un video en tres grandes bloques:

 

  1. Definición de los contenidos

  2. Grabación

  3. Edición y post-producción

 

Timeline

 

Estos bloques tienen tiempos dispares, y normalmente se confunde todo el proceso de producción de vídeo con las últimas dos fases, grabación y edición, pero ciertamente, la fase de mayor peso es la primera, la de planificación, y suele ser la que más se dilata en el tiempo por diferentes razones, como que siempre lleva más reuniones de las previstas, pues hay que dedicar tiempo a conocer y asimilar toda la información que la empresa ya tiene en el ADN, conocer su lenguaje, sus metas, todo lo que ha de contar.

Además, las propuestas suelen tardar en validarse, pues cada uno tiene su agenda… es una fase larga y tediosa. Negarlo sería engañarnos a nosotros mismos, y es que en la fase de creación de guión se tienen que alinear varios astros como mantener el techo presupuestario y mantener fechas de proyecto mientras se le da forma a una historia que siempre suele ir creciendo hasta que se hacen números de nuevo, y es que hacer un video requiere de ajustes constantes, además de muchos profesionales especializados, algo que no puede ser barato, como cualquier otra profesión con grandes requerimientos de experiencia y equipamiento. Por ejemplo, una construcción: puedes hacer una cabaña con troncos cortados por ti mismo, o puedes hacer una mansión de varias decenas de millones de dólares, de igual forma que le puedes pedir a un albañil que te diseñe y haga una casa, o contratas a un equipo con un arquitecto, interiorista, jefe de obra, aparejadores, albañiles... Entonces, ¿cuánto cuesta una casa? Lo que consideres más conveniente.

 

Fija una horquilla realista

Pongamos que la empresa quiere hacer un video corporativo. ¿Qué vale hacer un vídeo?, me preguntan sin dar más datos, a lo que me he acostumbrado a rebatir con otra pregunta: "Lo quieres, ¿con o sin helicóptero?". Si la respuesta es que "con helicóptero", añado otra pregunta mientras voy sacando papel y lápiz para apuntar... "Entonces, ¿qué pilote Julia Roberts y así nos ahorramos un piloto, no?"… Nunca nadie ha pasado al siguiente nivel. Ciertamente, cuando dimensionamos esto te das cuenta de que un video vale lo que quieras invertir, pues lo mismo se puede hacer de muchas maneras, pero hay límites, tanto por arriba como por abajo.

Como cualquier otra inversión importante, se necesita información para tomar una decisión, por lo que no vale el atajo de "¿qué han costado otros vídeos corporativos?", pues si fijamos una cifra sin conocer los objetivos podemos ser presas de un presupuesto que no permita alcanzar las metas, o podemos pasarnos y acabar desperdiciando el dinero. Se trata de encontrar un punto equilibrado entre lo que se quiere obtener y lo que se quiere invertir.

 

Lo tengo claro, pero dime, ¿cuánto cuesta un vídeo? 😝

Ya he dicho que cotizar un vídeo era una tarea complicada, por eso la fase de creación del briefing es fundamental porque se trata de conocer la empresa muy bien y venderla en menos de 2 minutos, además de mantener a raya el presupuesto fijado y encajar todas las piezas del puzzle. Para esta tarea lo que más falta hace es información. Toda y más. Algo que no se tiene cuando se pide un presupuesto, ¿entonces cómo valoramos esta fase?

Crear un guión para un video corporativo suele ser un trabajo de varios días o semanas, que ha de hacer un expert

o en marketing capaz de analizar la información y aportar un primer guión donde básicamente se listan los contenidos del video, que luego pasarán a un guión detallado y posteriormente a un storyboard. Para llegar hasta aquí hay que estudiar y sintetizar mucho. Cuanta más información aporte de inicio, menos días se tardará en recabarla y analizarla, y por tanto menos costes. Voilà! Aquí va la primera oportunidad de reducir el precio: preparar bien toda la información necesaria.

Durante esta fase de construcción de la historia suelen surgir ideas que pueden tener costes adicionales, por ejemplo, puede ser necesario alquilar equipamiento extra, contratar actores, pues ya sabemos que a la cámara es difícil de engañar. Y ahí surge de nuevo esa pregunta que todos nos hemos hecho alguna vez: ¿Qué vale un actor?, ¿un modelo?… al final es como preguntar ¿qué vale una casa?, ¿qué vale un coche?.. Como en este tipo de compras (con infinitas alternativas), lo más lógico es empezar por definir una inversión máxima deseable y una lista de requisitos para poder buscar la mejor relación de calidad-precio. Pero nos cuesta tanto dar esa cifra…

Necesitamos que eso cambie pues es bueno para todos tener claro qué se quiere conseguir y qué inversión se está dispuesto a hacer para lograrlo. De esta forma se optimiza la inversión, no se pierde el tiempo en ideas imposibles, y además nos podemos enfocar en exprimir creativamente los recursos disponibles.

 

Equipo Tecnico Produccion De Video Corproativo

 

Así pues, estas son las dos primeras grandes preguntas:

 

1- ¿Qué quieres obtener con el vídeo?

2- ¿Cuánto estás dispuesto a invertir?

 

Y con estos cuadrantes, un creativo experimentado y motivado es capaz de exprimir el guión para sacar petróleo. Palabra. Y si además de respuestas a estas preguntas traes una lista de los contenidos a incluir, alguien te hará la ola pues esta es la tercera gran pregunta:

 

3- ¿Tienes una lista de contenidos?

4- ¿Crees que vamos a necesitar animaciones? ¿tienes diseño gráfico? 2D?

5- ¿Has dicho 3D?.. ¡ALTO!

El mundo de la animación 3D, al nivel que nos tienen acostumbrados los anuncios de TV, está sólo al alcance de unos pocos. Hablamos de grandes producciones de publicidad como hablamos de "El Señor de los Anillos" en el cine. La animación de 3D es harina de otro costal, y ciertamente hay pocos profesionales especializados, que además precisan de conocimientos y equipos avanzados. Y cuando decimos avanzado, nos referimos a... a$van$za$do$, en especial si buscas recrear fluidos o animar personas.

Respecto a la animación de titulares y gráficos menos avanzadas, sin un guión detallado, es tremendamente complicado saber si van a hacer falta gráficos, o cuántos, bueno sí, tal vez sepamos de antemano que se necesitarán animaciones, pero ¿tenemos ya los diseños hechos para saber que hay que animar? Nunca se me ha dado el caso, y es que en el proceso de creación de guión se van dando forma a estos contenidos para que quede todo en un orden lógico y dinámico. Ese es el trabajo del guionista, hacer encarrilar el tren y ser el arquitecto de la historia, una labor que requiere de un alto conocimiento de comunicación audiovisual y marketing, así como algo de arte con en el storytelling y branding, dos palabras que resultan complicadas de traducir al castellano sin perder parte de su sentido, pero que son clave en la producción de videos, pues son el pegamento que todo lo une.

En la fase de la creación de guión está clara, ahora hablemos de la Grabación... y con en esto acabamos pronto: ¿de cuánto presupuesto disponemos?

Algo usual es que la conversación con la productora empiece con un ejemplo de un vídeo que ha costado decenas o centenas de miles de euros, pero al mirar a los ojos al cliente ves que no ese el presupuesto que tiene en mente, más bien está a 10 mil leguas de ese presupuesto, pero piden “algo como eso”. Estamos pues en el mismo callejón que con el 3D.

 

Bajemos de nuevo a la tierra.

 

Empecemos a dimensionar los precios de las jornadas de grabación, lo cual es complicado porque cambia bastante según la zona geográfica, por no tiene los mismos honorarios un operador de cámara en Madrid que en Alicante o Valencia, del mismo modo que no cobra lo mismo un técnico experimentado que uno novel. Pero si hacemos una media, y nos quedamos con un equipo básico de tres personas en una localización de coste intermedio, y contando una experiencia media/alta, podríamos sumar unos 1400€/día de grabación en gastos de personal, más el alquiler del equipo completo profesional de gama intermedia podría estar cerca de los 500€/día, que junto con otros gastos adicionales hace un coste diario aproximado de 2.500€ por día de grabación. Repito, precios orientativos e intermedios, ni lo más caro ni lo más barato (a febrero 2023). Esta cifra se multiplicará por 10 o más si el equipamiento y la plantilla son top, top, de igual forma que se puede abaratar mucho con una buena planificación y una optimización de todos los recursos. Se pueden rodar vídeos corporativos con dos personas y quedar de cine, incluso con grabación de entrevistas y testimonios, algo bastante común en los vídeos de empresa y que requiere de mucho equipamiento técnico y humano usándose simultáneamente. Y ya $abemo$ lo que eso significa.

Si quieres conocer cuales son las tarifas de los diferentes perfiles de un equipo de producción de vídeo, a modo orientativo, puedes descargarte este pdf con todos los precios que marca Storyhunter, una plataforma de concentración global de técnicos audiovisuales.

 

Tarifas equipo técnico para Video Corporativo Para Empresas Presupuesto

 

Como es lógico, buscaremos que sean necesarios el menor número de días de grabación, y eso es algo que no siempre es posible y que se ha de gestionar desde la fase de creación de guión y que pasará a las manos del productor, que es la figura que se ocupa de que todo, y todos, estén listos los días de la grabación. El productor es el conductor de este tren y es una figura clave en la gestión de los costes y la coordinación, y es que un rodaje, con poco o muy poco tiempo disponible, es vital hacer una buena planificación, así y todo, seguro que salta alguna liebre.

Al productor le seguirán, según haga falta para el proyecto: directores de fotografía, directores, operarios de cámaras, iluminadores (eléctricos), sonidistas, ayudantes, runners… Y esta lista puede seguir y seguir.

A estos gastos de personal y equipamiento se suelen sumar otros como maquillaje, peluquería, atrezzo, transporte, dietas, permisos, alojamientos, alquiler de plató, en el caso que sea necesaria la grabación de productos o modelos, en estudio.

Bien, ya lo tenemos grabado, ahora hay que montar el vídeo, y si se han grabado todos los planos bien y el guión está claro, en la fase de edición todo debería de encajar. Es momento de tejer una historia que transmita lo que la empresa quiere contar, algo valioso para el espectador, que no le aburra, y que por otro lado, que los que forman la empresa lo compartan con orgullo (y porque salen guapos), además de que el vídeo corporativo se convierta en una herramienta clave a la hora de presentar y explicar lo que la empresa ofrece.

Una vez tenemos el montaje final, pasamos a la fase de post-producción y colorgrading donde se retoca y da vida a la edición, además de reparar algunas costuras, sincronizar video y audio al milímetro (no nos olvidemos de que el sonido es el 50% de un vídeo), y dejarlo todo listo para publicar, para lo que hemos necesitado:

    1. Definir los objetivos
    2. Fijar una horquilla de gastos deseable
    3. Definir los contenidos
    4. Crear un guión
    5. Crear un storyboard
    6. Redefinir la horquilla de gastos
    7. Planificar la producción
    8. Grabación
    9. Edición
    10. Pros-producción
    11. Colorgrading

La producción de un vídeo corporativo puede durar entre 1 y 6 meses, y suelen intervenir entre 7 y 15 perfiles técnicos diferentes, va a ser necesario alquilar equipos profesionales con un valor entre 20 y 60 mil euros, y que después de unos 100, 200 ó 500 horas de trabajo ha de tener como resultado un vídeo que se parezca, o supere, al vídeo que tenía el cliente cuando preguntó eso de "¿qué vale un vídeo corporativo?".

Por suerte, tenemos una fórmula matemática con la que calcular de forma precisa, sin pasarse, los costes de cualquier producción de vídeo:

OBJETIVOS + INVERSIÓN + INFORMACIÓN = BUEN RESULTADO

¡Simple!

 

 


TIP: Cuando escribí este post tenía como intención que se conociera el trabajo que hay detrás de la solicitud de un presupuesto en una producción audiovisual, por lo que sólo te pido una cosa: si has pedido una cotización de video, o de lo que sea, por favor, dale una respuesta con la decisión tomada, se lo merece, pues seguramente habrá dedicado un tiempo a conocer tu proyecto y a buscar una horquilla presupuestaria que te aporte unos buenos resultados. Y ya se sabe, es de bien nacidos, ser agradecidos.


 

 

Ver video reel de YAMUVE, productora audiovisual en Valencia, Alicante y Madrid

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